La espera terminó. El pasado 7 de enero de 2022, en el Hospital Baca Ortiz en Quito, Juan y María Inés recibieron cada uno, un trasplante de riñón, así lo informó el Ministerio de Salud. Ambos niños sufren problemas renales y hasta la fecha se han realizado tratamientos de diálisis de manera permanente.
Estas complejas operaciones, explicó el MSP, se realizan cuando el Instituto de Trasplante de Órganos y Tejidos (INDOT) notifica sobre la existencia de órganos, en este caso pediátricos. Para el proceso de selección de los beneficiarios se aplican rigurosos exámenes para identificar la mayor compatibilidad. Patricia P., madre de María Inés, también fue informada que su hija era apta para el procedimiento. Ambos fueron intervenidos el mismo día.
“Tuvimos que esperar más de dos años para que mi hija sea compatible para un trasplante renal. La alegría y esperanza de que pueda tener una vida normal regresaron. Las personas necesitan los órganos aquí, en la tierra y no en el cielo”, comentó Patricia.
Jorge García, líder de Urología, junto a un equipo multidisciplinario fue el encargado de llevar adelante los dos trasplantes. Estos procedimientos forman parte de la estrategia nacional, detalló el MSPO, “Reactivando la Salud” (RAS) que implica la recuperación de los servicios esenciales en el 100% de los establecimientos de salud del país.
Así después de dos años, el viernes pasado se reanudaron las intervenciones luego de estar suspendidas debido a la crisis sanitaria. Antes de la pandemia se ejecutaban, detalló el MSP, hasta 57 cirugías de trasplante.
