Aproximadamente 45 cooperativas tienen suspendidas sus operaciones por bloqueos en vías.
Las movilizaciones de grupos indígenas han derivado en afectaciones a nivel económico y también en complicaciones para pasajeros que no pueden retornar a sus hogares o continuar sus actividades laborales en poblados de la Sierra y Amazonía.
En la terminal terrestre de Guayaquil, en medio de las operaciones irregulares que se llevan adelante por las protestas, se calcula una pérdida de alrededor de $ 60.000 a $ 80.000 por valores de tasas cobradas a pasajeros y cooperativas de buses que han dejado de movilizarse a través de esta estación.
En general, entre los actores económicos que brindan servicios en la zona se estima que la afectación supera los $ 2 millones, según datos de la fundación a cargo de la estación matriz.
“Repercute en locales del centro comercial, en ingresos de taxistas, maleteros, carretilleros, betuneros, lavacarros, de las propias cooperativas de transporte y la misma fundación, estimamos que llevamos más de $ 2 millones de pérdida entre todos los actores económicos que conforman esta comunidad en la terminal terrestre”, comentó Klíder Campos, subgerente de la fundación Terminal Terrestre de Guayaquil.
Actualmente, la estación matriz tiene suspendidas las operaciones de aproximadamente 45 de 90 cooperativas, sobre todo con traslados a la Sierra y Amazonía, debido a los bloqueos derivados de las movilizaciones de grupos indígenas.
Dentro de las cooperativas operativas hay buses que circulan por vías alternas o trasbordos para que los pasajeros lleguen a sus destinos, aunque asumiendo ciertos riesgos y mayores gastos.
Antes de la jornada de movilizaciones, la terminal terrestre contabilizaba un promedio de 42.000 viajeros al día, pero actualmente esa cifra se ha reducido a 22.000. Con ese balance, unos 300.000 pasajeros han dejado de movilizarse en los recientes quince días por esta estación matriz hacia distintos destinos del país.
En los pasillos de la terminal, el ajetreo de la venta de boletos es menor al acostumbrado. Desde el interior de ciertas ventanillas se vocean destinos como Manta, Salinas, Esmeraldas, Machala, a los cuales se mantienen traslados.