El año 2022 no traerá en apariencias más sobresaltos al ex vicepresidente Jorge Glas, quien goza de libertad desde hace un mes.
Glas permaneció en prisión cerca de 5 años, exceptuando un mes, desde el pasado abril hasta mayo, debido a su participación en el Caso Sobornos, el cual le valió una sentencia de 8 años de cárcel.
Su objetivo ahora es que se unifique esta sentencia con una de 6 años, que recibió por el Caso Singue.
Dentro de este proceso, la jueza de Garantías Penitenciarias de Pichincha, Melissa Muñoz, dio 5 días extras de plazo a la defensa del ex segundo mandatario, para que presente el certificado médico, avalado por el Ministerio de Salud, que excuse el diferimiento de la audiencia de pena única, que debió efectuarse el 12 de diciembre pasado.
El equipo legal de Glas afirma que el MSP, no da respuesta a la “solicitud de aval de certificados médicos”. Sin ese documento, no puede avanzar el trámite de unificación de penas.
El ex vicepresidente presentó en principio un certificado médico simple, que fue rechazado por la jueza.
En vista de la cercanía de fin de año, lo más probable es que cualquier diligencia nueva sea fijada para enero.
Glas fue operado de la cervical luego de salir en libertad con medidas cautelares, alegando problemas de salud.
