Una posible desaparición del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), genera aprobación en muchos sectores del país.
Uno de ellos es la Comisión Nacional Anticorrupción (CNA).
En diálogo con “Punto de Orden”, el coordinador de este organismo, Germán Rodas, advirtió que el CPCCS se ha vuelto un ente conflictivo, que no representa a los ciudadanos. De ahí que pocos consideran que debe subsistir.
De ahí la importancia de la próxima consulta popular, dijo, ya que permitirá, además de establecer el futuro de ese poder del Estado, sentar las bases para reformar la estructura del país, en aspectos como reducción de asambleístas, bicameralidad e independencia de la justicia.
Rodas también defendió el trabajo realizado por la CNA, que durante su existencia ha realizado importantes denuncias sobre irregularidades en el sector público. Por ejemplo, el escandaloso sobreprecio en la compra del terreno de la supuesta Refinería del Pacífico, que pasó de 200.000 a 2 millones de dólares; los sobreprecios en las hidroeléctricas, en la compra de los helicópteros DRUV y en la adquisición de medicinas para el Seguro Social; la venta irregular del Hotel Quito, entre otros casos.
Estas denuncias han significado persecución y represalias para los miembros de la CNA, que afrontan demandas combinadas por 50 millones de dólares.
Sin embargo, Rodas afirmó que continuarán su trabajo con entereza y dedicación.
