El sector automotriz hizo un urgente llamado al Gobierno Nacional, para que baje los exagerados impuestos que rigen para los carros, y de ese modo brinden un impulso a la actividad.
En diálogo con nuestro noticiero “Punto de Orden”, Daniel Wiener, gerente general de Induwagen, explicó que en el Ecuador, el comprador de un vehículo debe pagar un arancel que varía entre el 35 y 40%, el Impuesto a los Consumos Especiales (ICE), que va del 5 al 35%, y finalmente el Impuesto al Valor Agregado (IVA), que es del 12%.
Es decir, el usuario termina pagando prácticamente el doble del costo del carro, lo cual es distorsionante para el mercado nacional.
Wiener anotó que, durante el año 2022, el sector vendió alrededor de 140.000 unidades. Si bien la cantidad es buena, podría ser mucho mejor, ya que, debido a los numerosos recargos, los compradores terminan por elegir los carros más baratos, o se inclinan por usados.
Solo el ICE significó para el Estado durante el 2022, por concepto de venta de vehículos, 250 millones de dólares. Una cantidad que supera a la del 2021, pero que, insiste, podía ser mucho mejor.
El empresario recordó que la industria automotriz representa 160.000 empleos. Si los impuestos bajaran y subieran las ventas, habría muchas más plazas, y además despegarían sectores dedicados a los insumos, como aceites, llantas, accesorios, etc.
Asimismo, carros más baratos atraerían a los clientes a pedir créditos, lo cual repercutiría favorablemente en el sector financiero.
Weiner remarcó finalmente que, en otros países, únicamente se cobra el IVA. Chile, por ejemplo, que apenas nos supera en población con 2 millones de habitantes, vende más del doble de carros, gracias a que no tiene tantas cargas tributarias.
